Epidemiología
Es un problema de salud de primera importancia ya que se estima que su prevalencia se encuentra entre el 21 y el 25% de la población adulta general, ya sea sistólica, diastólica o de ambas.
Etiología
En el 90% de los casos la causa es desconocida, por lo cual se ha denominado hipertensión arterial esencial, con una fuerte influencia hereditaria. En el 5 al 10% de los casos existe una causa directamente responsable de la elevación de las cifras tensionales: es la hipertensión arterial secundaria.
La mayor parte de las veces, hablamos de HTA idiopática o esencial, pero en el 10% de los casos hay que descartar causas secundarias de HTA. Sospecharemos HTA secundaria cuando aparece en individuos jóvenes, es difícil de controlar con fármacos, y presentan episodios precoces de HTA maligna.
Son causas de HTA secundaria las siguientes:
- Coartación de aorta
- Embarazo
Farmacológica
- Ciclosporina
- Corticoides
- Cocaína
- Anfetaminas
- Otras sustancias simpaticomiméticas
- Inhibidores de la monoaminooxidasa y alimentos con tiramina
- Antiinflamatorios no esteroideos
- Eritropoyetina
- Alcohol
Renal
- Glomerulonefritis aguda
- Pielonefritis crónica
- Nefropatía diabética
- Hidronefrosis
- Estenosis vascular renal o hipertensión renovascular
- Tumores secretores de renina
- Retención primaria de sodio
Endocrina
- Anticonceptivos orales
- Acromegalia
- Síndrome de Cushing
- Hipertiroidismo
- Feocromocitoma
- Hipercalcemia
- Síndrome carcinoide
Neurológica
- Hipertensión intracraneal
- Apnea del sueño
- Encefalitis
- Disautonomía familiar
- Polineuritis
- Síndromes de sección medular.
Las enfermedades renales, en particular la HTA vasculorrenal, constituyen la causa más frecuente de HTA secundaria. Por otro lado, la causa endocrina más frecuente de HTA secundaria es el uso de anticonceptivos orales.
En pacientes de edad avanzada puede encontrarse HTA exclusivamente sistólica (HTA sistólica aislada), probablemente condicionada por rigidez aórtica. Comporta un riesgo cardio- vascular similar, por lo que se beneficia igualmente del tratamiento. Es relativamente frecuente que se asocie a hipotensión ortostática.
Diagnóstico
Habitualmente la HTA esencial suele ser un hallazgo casual en pacientes asintomáticos, expresándose clínicamente en fases más avanzadas tras desarrollar daño de órgano. Ante una elevación de la presión arterial, debe confirmarse el diagnóstico de hipertensión arterial tomando la presión arterial repetidamente durante dos o tres semanas. Es fundamentalmente clínico y deberá establecerse si la hipertensión arterial es primaria o secundaria, con o sin repercusión orgánica.
La HTA se define como la tensión arterial mayor o igual a 140/90 mmHg obtenida con la medida de tres tomas, separadas al menos por dos semanas de intervalo, para enfermos mayores de 18 años sin tratamiento y libres de enfermedad aguda. Se calcula como la media obtenida a partir de dos o más medidas correctas, obtenidas en cada una de dos o más visitas en consulta, y llevadas a cabo en posición sentado.
Debe utilizarse el método auscultatorio de medida de la presión arterial con un instrumento calibrado y adecuadamente validado. Los pacientes deben estar sentados y quietos en una silla durante al menos 5 minutos (mejor que en la camilla de exploración), con los pies en el suelo, y el brazo a la altura del corazón. La medida de la presión arterial en bipedestación está indicada periódicamente, especialmente en quienes tengan riesgo de hipotensión postural. Debería usarse para una correcta toma un tamaño adecuado de brazalete. En determinados casos, se utilizará la monitorización ambulatoria de la presión arterial (MAPA) o la automedida de la presióna arterial (AMPA).
Evaluación
La evaluación de los pacientes con hipertensión arterial docu- mentada tiene tres objetivos:
1. Constatar el estilo de vida e identificar otros factores de ries- go cardiovascular o desórdenes concomitantes que puedan afectar al pronóstico, y como guía del tratamiento.
- Revelar causas identificables de elevación de la PA
- Aclarar la presencia o ausencia de daño en órganos diana.
- Los datos necesarios serán proporcionados por la anamnesis, el examen físico, las pruebas rutinarias de laboratorio y otros pro- cedimientos diagnósticos. La exploración física debería incluir una medida apropiada de presión arterial, con verificación en el brazo contralateral, examen del fondo de ojo, cálculo del Índice de Masa Corporal (IMC) (también puede ser útil la medida de la circunferencia de cintura), auscultación carotídea, abdominal y soplos femorales, palpación de la glándula tiroi- dea, examen completo de corazón y pulmones, exploración abdominal que incluya riñones, detección de masas y pulsacio- nes aórticas anormales, palpación de pulsos y edemas en extre- midades inferiores, así como una valoración neurológica .
Evolución
Los pacientes con prehipertensión tienen un riesgo incrementado para el desarrollo de HTA; los situados en cifras de 130-139/80-89 mmHg tienen doble riesgo de presentar HTA que los que tienen cifras menores.
Pruebas complementarias
Antes de comenzar la terapia antihipertensiva, se recomienda realizar:
- Electrocardiograma
- Analítica
- Análisis de orina
- Glucosa sanguínea
- Hematocrito
- Potasio sérico
- Creatinina, o TFG.
- Calcio
- Perfil lipídico. LDL, colesterol y triglicéridos
- Albúmina urinaria. Total o cociente albúmina/creatinina.
En caso de un mal control con antihipertensivos, se debe investigar causas secundarias de HTA.