Apertura de la uretra en la superficie ventral del tallo del pene. El prepucio no está desarrollado (capuchón dorsal) y se sitúa en la cara dorsal del pene. Es una anomalía aislada aunque también es frecuente asociada a malformaciones congénitas múltiples (criptorquidia, hernias inguinales).
Según la posición del meato uretral y dependiendo de que exista o no cordón fibroso, lo podemos clasificar en: glandular (en el glande) y coronal (más frecuentes), subcoronal, mediopeneana, penoescrotal, escrotal, perineal (más grave). Los tres últimos son hipospadias proximales y tienen mayor frecuencia de cordones fibrosos que incurvan el pene.
En las mediopeneanas o proximales, junto a criptorquidia, debe estudiarse el cariotipo y en los penoescrotales debe practicarse un CUMS (ya que puede asociarse a dilatación del utrículo prostático).
La edad ideal para proceder a la reconstrucción es entre los 6 y los 12 meses, con cirugía en uno o dos tiempos según la extensión del defecto.