Trastorno más frecuente de la diferenciación sexual de los niños, consistente en la falta de descenso fisiológico de uno o ambos testes en el escroto. Se encuentran localizados en algún punto de su trayecto habitual de descenso (conducto inguinal). Al nacimiento afecta al 4,5% de los varones y al 30% de los prema- turos.
Es bilateral en un 10-20% de los casos. Testículo palpable en conducto inguinal o nivel supraescrotal (70%). En ocasiones existe ectopia testicular (bolsa inguinal superficial o periné).
Diagnóstico diferencial
- Anorquia o ausencia testicular: la hormona antimulleriana está muy disminuida y tras administrar hCG (que estimula las células de Leydig) no se detecta aumento de testosterona.
- Testes retráctiles o en ascensor: control cada 6-12 meses, para descartar un teste no descendente. No comportan mayor riesgo de esterilidad ni de trasformación maligna.
- Hiperplasia suprarrenal congénita: causan virilización en niñas RN (46XX).
Tratamiento
La mayoría descenderá de manera espontánea hacia los 3 meses de vida. Si a los 6 meses no han descendido, se realizará control periódico hasta los 9-15 meses, momento en que se adminis- trará tratamiento hormonal con LHRH o hCG hasta los 2 años. Contraindicaciones al tratamiento hormonal: hernia inguinal ipsilateral, ectopia teste, torsión y cirugía previa inguinal. Si aún así no desciende, será preciso cirugía:
- Orquidopexia para llevarlos al escroto.
- Laparoscopia si el teste no es palpable, para determinar su localización (el 50% son intraabdominales o están en la parte superior del conducto inguinal).
- Orquiectomía si los testes son atróficos.
Complicaciones
- Esterilidad: testes histológicamente normales al nacimiento, aunque pueden sufrir retraso en la maduración de las células germinales a los 6-12 meses de vida. Además, estas alteraciones pueden aparecer en el teste descendido hacia los 4-7 años. Tras el tratamiento de la criptorquidia bilateral el 50-65% son fértiles y si es unilateral este porcentaje asciende a 85%.
- Tumores: sobre todo en testes intraabdominales no tratados o si se ha realizado tratamiento quirúrgico en la pubertad o tras ésta (a partir de los 15 años). Son más frecuentes en casos de criptorquidia unilateral. El más frecuente es el seminoma.
- Hernias inguinales indirectas: acompañan siempre a la criptorquidia verdadera, siendo más frecuentes en los casos de testes ectópicos. Puede torsionarse o infartarse por movilidad excesiva.
- Efectos psicológicos del escroto vacío.